El Santo Rosario
Oración antes del Rosario: Reina del Santo Rosario, Tú que te dignaste venir a Fátima para revelar a los tres pastorcitos los tesoros de gracia ocultos en el Rosario, infunde mi corazón con un sincero amor a esta devoción, con el fin de que por la meditación de los Misterios de nuestra Redención, que son recordados en él, pueda ser enriquecido por sus frutos y obtener la paz para el mundo, la conversión de los pecadores y de Rusia, y las gracias por las que ruego en este Rosario. (Aquí mencionar la petición). Pido esto para la mayor Gloria de Dios, por Tu gloria y para el bien de las almas, especialmente por la mía. Amén.”
El Credo: Creo en Dios Padre Todopoderoso, creador del Cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María la Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilatos, fue crucificado, muerto y sepultado. Descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos; subió a los Cielos y está sentado a la derecha de Dios Padre todo poderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los Santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.
Se empieza a rezar el Santo Rosario (según el día de la semana se eligen los Misterios a rezar). En las cuentas grandes el Padre nuestro
Padre Nuestro: Padre Nuestro que estás en el Cielo, santificado sea Tu Nombre; venga a nosotros Tu Reino; hágase Tu Voluntad así en la Tierra como en el Cielo… Todos: Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras deudas, así como también nosotros perdonamos a nuestros deudores; no nos dejes caer en tentación y líbranos del mal. Amén.
Y en las 10 cuentas pequeñas :
Ave María: Uno: Dios te salve, María, llena eres de gracia. El Señor es contigo. Bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús… Todos: Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén. (10 veces)
Al terminar cada decena decir:
Gloria: Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Y después decir la Oración a Jesús pedida por Nuestra Señora (Oración de Fátima):
“Oh mi Jesús, perdona nuestros pecados; líbranos del fuego del infierno, lleva a todas las almas al Cielo, especialmente a las más necesitadas de Tu Misericordia. Amén.”
y también ésta Jaculatoria: “Oh María sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a ti”.
Al terminar el Rosario decir la Salve: Dios te salve Reina y Madre, Madre de Misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra. Dios te salve a ti clamamos los desterrados hijos de Eva; A Ti suspiramos gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. ¡Ea, pues, Señora, Abogada nuestra! Vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de Tu vientre. ¡Oh clemente! ¡Oh piadosa! ¡Oh dulce siempre Virgen María! Ruega por nosotros Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas y gracias de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.
Y la Oración para después del Rosario:
Oh Dios, cuyo Hijo Unigénito, por Su vida, muerte y resurrección, nos ha comprado la recompensa de la vida eterna; concédenos, te suplicamos, que, meditando sobre estos misterios del Santísimo Rosario de la Bienaventurada Virgen María, podamos imitar lo que contienen y obtener lo que prometen, por el mismo Jesucristo, Nuestro Señor. Amén.”
Y la Oración a San Miguel Arcángel: San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla. Sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los otros espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén
* Las personas que recen el Rosario y luego las oraciones de la cruzada, entonces ver :
La coronilla de la Misericordia es como siempre se reza y terminando esto entonces empezar con las oraciones de la cruzada, que se hayan elegido para ese día de oración con el grupo. Teniendo en cuenta de que hay 6 oraciones que se deben rezar diario + las 6 letanías, independientemente del día en que nos reunamos con el grupo de oración.